Sobre la mesa
el abanico tierno
Un pájaro muerto en pleno vuelo
La casa de enfrente
blanca de yeso y de nieve
En el jardín ignorado
alguien pasea
Y un ángel equivocado
Se ha dormido sobre el humo de la chimenea
Para seguir el camino
Hay que recomenzar
QUIÉN ESCONDIÓ LAS LLAVES
Había tantas cosas que no pude encontrar