Contempla en su delirio de José Corredor-Matheos

Contempla en su delirio
algo que es tan real
que yo no puedo verlo.
Oigo cómo la lluvia
va cayendo
en las calles que no existen
si no es en la memoria.
¿Por qué los corazones
elegidos
son siempre solitarios?
En el cuarto de al lado,
un hombre está hablando
con sus muertos.
El soplo del delirio,
los presagios
lavados por la lluvia,
son una luz muy pura.