Dolor de dolores de Serafín y Joaquín Álvarez Quintero

Dime, «¿por qué es ese llanto?»
«Por una ilusión perdida,
por una reciente herida,
por un nuevo desencanto…»

«Pues no llores más… y olvida»

«¿Porqué lloras, flor de flores?»
«Porque él era dueño mío,
el que me hablaba de amores,
me hiere con desvío…»

«Pues olvídalo… y no llores.»

«¿Porqué sollozas ahora?»
«¡Ay! Ya no alumbra la aurora
ni dará flores mi huerto…
Lloro por mi niño muerto…»

«Pues, no lo olvides… y llora».