No el astuto plebeyo que no pierde
de vista y disimula
las llaves de la cava.
Habla de la poética gravemente
reclama la verdad, astuto zorro
que entre un hipo y traspiés mantiene algo
que hasta el Señor confunde, virtuoso.
No a su coartada infame,
a su afición oculta a las computadoras.
***
El bando
cuelga entre cornucopias:
lupas siguen
el texto de la carta
promulgada y extinta.
Ya que llovió después.