Mykonos
Ebrio de luz el mar
desnudo y solo
Ustica
Sórdida un ave de sombra
y graznidos y viento y un negro minuto
de adiós y de espectros
Simushir
Cerros y luna canta
ave nocturna el tiempo
entre las olas blancas
Lemnos
Con desgana columnas que sustentan la tarde
El crepúsculo un ave que no acierta a volar
Zembra
Indolente y dorada
habitada por vientos
astros música magia
Bornholm
Nostalgia que salpican las olas y las horas
Sirenas indolentes de lejanos navíos
Bosteza la mañana con sueño y gaviotas
Kornat
Desierto vago junto al agua
que acecha lúbrica y me ama
en una lengua que no entiendo