Kolymbosai o las nadadoras de Aurora Luque

Termas desmoronadas
cerca del mar. La huella anaranjada
y mineral de aguas milenarias
al fondo del estanque, sobre losas y líquenes.
Cualidad de blandura semejante
en el tiempo, la hiedra espesa, el mar,
la historia erguida, el cuerpo. Balnearios
con aguas incansablemente mágicas
y pasadas de moda. En los lechos de piedra,
junto a piscinas rotas
tenderme, tenderme boca arriba, el indolente
racimo de uvas negras rozándome los labios
como a Greta, la gloria del amor
medido desde dentro
-su membrana de luz, su cauce oscuro,
su arquitectura extraña de termas laberínticas.