Las perfecciones naturales de José Emilio Pacheco

De las capitanías de la oruga
sabe el rosal
lo que le corresponde

Silenciosas boquitas
que roen de noche
o bajo la altanera plenitud del gran sol
las perfecciones naturales

Ante ellas no hay belleza
Sólo avidez
sólo la necesidad de estar vivas

Y perduran matando
como nosotros