Para un corpiño de Manuel Gutiérrez Nájera

Las campánulas hermosas,
¿sabes tú qué significan?
Son campanas que repican
en las nupcias de las rosas.
-Las campánulas hermosas
son campanas que repican.

¿Ves qué rojas son las fresas?
Y más rojas si las besas…
¿Por qué es rojo su color?
Esas fresas tan suaves
son la sangre de las aves
que asesina el cazador.

Las violetas pudorosas,
en sus hojas escondidas,
las violetas misteriosas
son luciérnagas dormidas.
¿Ves mil luces cintilantes
tan brillantes cual coquetas,
nunca fijas, siempre errantes?
¡es que vuelan las violetas!
La amapola ya es casada;
cada mirto es un herido;
la gardenia inmaculada
en la blanca desposada
esperando al prometido.

Cuando flores tú me pides
y te mando «no me olvides».
y esas flores pequeñitas
que mi casto amor prefiere,
a las blancas margaritas
les preguntan; «¿No lo quiere?»

«¡No me olvides!» Frescas flores
te prodigan sus aromas
y en tus hombros seductores
se detienen las palomas.
¡No hay invierno! ¡No hay tristeza!
Con amor, naturaleza
todo agita, todo mueve…,
luz difunde, siembra vidas…

¿Ves los copos de la nieve?
¡Son palomas entumidas!
Tiene un alma cuanto es bello;
los diamantes son los trémulos amantes
de tu cuello.
La azucena que te envío
es novicia que profesa,
y en tu boca es una fresa
empapada de rocío.
Buenos dioses tutelares,
dadme ramos de azahares.

Si me muero, dormir quiero
bajo flores compasivas…
¡Si me muero, si me muero,
dadme muchas siemprevivas!