Paso de Federico García Lorca

Virgen con miriñaque,
virgen de Soledad,
abierta como un inmenso
tulipán.

En tu barco de luces
vas
por la alta marea
de la ciudad,
entre saetas turbias
y estrellas de cristal.
Virgen con miriñaque
tú vas
por el río de la calle,
¡hasta el mar!