¡Amor! ¡Amor! ¡Qué has hecho de mi vida!
mi vida era como un agua mansa,
como un agua ceñida. ..
Antes de ti, ¡qué fácil para el alma
la espera de sus pasos, y qué fácil
su ligera partida…!
Antes de ti, ¡qué fácil la ventura
frente a la lluvia clara y el silencio
de las tardes dormidas…!
Pero contigo, Amor, cómo se vuelven
la espera y el partir angustia viva. ..
¡Cómo tus manos claras, inasibles,
rompen las horas mías!
Contigo, Amor, la lluvia no es «la lluvia'»
ni me da su regalo de sonrisas,
y es tortura el silencio cuando pasa
por las tardes dormidas…
***
Antes de ti, qué fácil el olvido
del país todo rutas para el sueño
que detrás de sus ojos existía…
Antes de ti, qué fácil el momento
de la estrella primera, sobre el Ángelus
brillando sorprendida…
Pero contigo, Amor, cómo se vuelven
la estrella y olvidar angustia viva…
Cómo tus manos claras, inasibles,
la dulzura me trizan…
Contigo, Amor, este fingido gozo
mientras el alma cuenta sus espinas,
y esta quebrada voz para su nombre,
y este afán inquietando la alegría…
***
Contigo este decir atribulado…
¡Amor! ¡Amor! ¡Qué has hecho de mi vida!