Javalambre con nieve. Sobre el pecho,
como una inmensa herida,
los Mansuetos se abren: Carne joven
en la vieja tierra. Gira el cielo.
Pasan, camino de la mar,
los enormes camiones de transporte:
¡Adiós!
¡Adiós!
Hoy, San Martín mudéjar, me nostalgia
los amigos que tuve, allá, en mi infancia.
Miro hacia el fondo: Villaespesa.
Todo lleva consigo
la tierra que surge desde dentro:
Teruel:
Áridas voces de mineros, ascienden
del violento carmín de tu paisaje.