A LAS DAMAS DE LA CORTE de Luis de Góngora

Hermosas damas, si la pasión ciega
No os arma de desdén, no os arma de ira,
¿Quién con piedad al andaluz no mira,
Y quien al andaluz su favor niega?

En el terrero, ¿quién humilde ruega,
Fiel adora, idólatra suspira?
¿Quién en la plaza los bohordos tira,
Mata los toros, y las cañas juega?

En los saraos, ¿quién lleva las más veces
Los dulcísimos ojos de la sala,
Sino galanes del Andalucía?

A ellos les dan siempre los jüeces,
En la sortija, el premio de la gala,
En el torneo, de la valentía.