¿Qué es el arte? —De dolores
un germen, lleno de encanto;
sol de quemantes fulgores;
divino carmen de flores
que riega el alma con llanto.
¿Qué es la luz? —Un pensamiento.
¿Y la gloria? —Una emoción
en que hay placer y tormento;
porque el mundo da al talento
aplausos y proscripción.
. . . . . . . . . . .
Artista, la gloria quema;
el laurel* se torna en palma;
el aplauso es anatema:
porque el arte su diadema
forma con llanto del alma.
Por eso tú, a quien pregona
la fama actriz, y caminas
entre aplauso que emociona,
te ciñes bella corona
de laureles y de espinas.
Sufre y triunfa: es necesario
ya que tu ingenio profundo
orna del arte el santuario,
que atravieses un Calvario
entre el aplauso del mundo.
Sufre y triunfa: al fin la historia
vendrá de tu nombre en pos,
para guardar tu memoria;
que si Dios es todo gloria,
la gloria es algo de Dios.