¿Cómo se llamaría en su juventud? No lo sé. Al llegar a Israel los judíos cambian nombres
y apellidos para no aparecer como Rosenthal, Weisman, Mayer, Meyer, Kohn, Suderman, etc.
Inventó poetas como aquel esclavo Abu Gosh. Tenía pocas ideas. Escribía en alemán y lo
traducía al hebreo. Murió un viernes, al no encontrar quién ni cómo llevarlo a un hospital,
en Jerusalén, el 27 de enero de 1967: Ya no era joven, creen que había nacido en Berlín.
No creo que muriera en acción aunque me dijeron que sí. Lo dudo, no de la autenticidad
de su poesía.
1
El tiempo, a veces, hace mal las cosas:
perdida, perdida, perdida
que sólo en mí moras.
Sólo a ti veía,
gacela: sólo a ti veías;
no me querías ver.
2
En el recuerdo sólo quedas tú,
historia, piedras, colores,
aguas y tierra…
Allí quedaste, yo me fui, aquí estoy
sin ti. Solo quedó la marca
de tus dedos en los míos,
meras huellas dactilares.
Sólo a ti veía,
gacela: sólo a ti veía;
no me quenas ver.
3
Nada te pedí
¿qué me podías dar que dar pudieras?
Nada me diste, sólo te miraba.
En mí te llevo, y tu labio inferior,
rosa judía, salidillo,
el rosa más oscuro, rosa amor
y a tus ojos profundos.
Sólo a ti veía
gacela: sólo a ti veía;
no me querías ver.
4
Nada tienes que ver conmigo y,
a pesar de ello, estás más cercana a mí
que mi pensamiento
en esta noche
que nos separa desde siempre
de todo y de todos.
Estoy solo en la oscuridad del día;
solo, contigo; tú lo sabes.
Sólo a ti veía,
gacela: sólo a ti veía;
no me quenas ver.
5
Tienes las piernas más perfectas
que cualquier hombre haya visto.
Si no lo sabes te lo digo.
Tienes la boca más perfecta
que cualquier hombre haya visto
si no lo sabes te lo digo:
¡Oh, tú, suave, suave, suave,…!
Sólo a ti veía,
gacela: sólo a ti veía;
no me querías ver.