Tú me miraste
cuando yo era
un mendigo,
tú me miraste así,
cuando estaba sin nadie.
Cuando pensé morir
tú
me miraste,
y eso fue
para mí
volver a casa:
aquella noche
tú me invitaste a entrar
y entonces me miraste.
Tú me miraste
cuando yo era
un mendigo,
tú me miraste así,
cuando estaba sin nadie.
Cuando pensé morir
tú
me miraste,
y eso fue
para mí
volver a casa:
aquella noche
tú me invitaste a entrar
y entonces me miraste.