Siento el latido inmenso en la llanura
y lo canto en la altura de la cumbre.
En plena libertad, libres procura
Todas las Cosas. Jamás servidumbre
En la fuente del gozo, en tu hermosura
He hallado. ¿Ves?, amor, en muchedumbre
Cruzo el dédalo; mas contigo, pura
Naranja que ha crecido de la lumbre,
¡Cuánta luz salta con la sombra mía!
En plenitud de paz en ti me inclino,
Más allá del amor nada nos guía:
Sendas y objetos vuelcan el destino
En la hoguera del alba. Noche y día,
La tuya, amor, al tiempo desafía.
Versión de Alfonso Alegre y Victoria Padilla