Enamorados sólo por esparcimiento de Eduardo Espina

De la escritura que a tu ostra todo atrae
retardando esta inmensidad de materias
aparecidas como clima a quien reparten
por la entera estima de tropas tristes que
dudan desovar el estreñimiento a través
de berenjenas en el perdurar del frutero
que al chirle destripa pelón por el diván
donde sierva mutua de mi verbo junto a
la jaula dormirás aliviada de la ligereza,
porque melodioso soy el desmemoriado
que no canta de la historieta lo pasado y
no sé si fue anoche o pasmado mañana
como aquel revés de mi resma entrando
por las comisuras de las lacas en tu caca
que salpicabas como cal por el gallinero
de igual manera hasta la perdigonada en
el pijamas cuando a dormir se acomoda
restregando el gamulán por los orificios
que a su beneplácito al belfo adormelan
o dime si es mía memoria la que miente
y esas cosas que pasaron dejaron de ser
la tamaña tropa de hetairas cuando eran
tan bien dos cuerpos del otro por detrás
del celofán donde melaza marrón arreas
en los resabios de la vejiga al aguardar
debajo de la pirámide la dudosa verdad
que al buche del entenado se le parezca,
porque causas encuentran a lo ocurrido
por ensimismar el órreo o la semejanza
entre los resquebrajos la penúltima vez
en que pegados del rabo al despeñadero
pues como cae la caspa caen los reinos
por la resolana mejorada donde silba la
belleza traída al momento de los demás
que a su cerco devuelvan aquella noche
en que los desaseados purgaban iguales
a la garcha hinchando el apocado plano
del castrapuercas por la frez enamorada
que mustia vaya, de la orilla a! corazón
y a su sazón las sílabas puestas a saltar
la soga en una lona de boda y metáfora.