Árbol que eres un penoso relámpago,
veinto que arrebatas una ardiente materia,
bosques de rayos entre el agua nocturna;
¿he de decirles que para mí se está forjando
unapesada joya en mi corazón, una hoja
que hiende como una estrella el refucio de la sangre?
Poemas de Javier Sologuren
Most musical of mourners, weep anew!
Not all to taht bright station dared to climb.
Shelley
Tejido con las llamas de un desastre irresistible,
atrozmente vuelto hacia la destrucción y la música,
gritando bajo el límite de los golpes oceánicos,
el hueco veloz de los cielos llenándose de sombra.
Soy un cuerpo que huye, sombra que madura
con un murmullo de hojas en tu mirada
igual al mediodía cruel y esplendoroso:
mar, ala perdida, párpados de nieve,
casto sonámbulo entre materias corrompidas,
ola sedosa en que tristemente espejeo.
Toda palabra es mía cuando estoy a la orilla
de tus ojos, mar, todo silencio es mío.