Un día preguntaron qué deseaba
y le trajeron aquella que había perdido en su juventud.
Después de siete lunas y siete sonrisas
un hueso de uva
le separó de sus brazos
de su perfume
y sus ajorcas.
Un día preguntaron qué deseaba
y le trajeron aquella que había perdido en su juventud.
Después de siete lunas y siete sonrisas
un hueso de uva
le separó de sus brazos
de su perfume
y sus ajorcas.