La tarde de Meira Delmar

Te contaré la tarde, amigo mío.

La tarde de campanas y violetas
que suben lentamente a su pequeño
firmamento de aroma.

La tarde en que no estás.

El tiempo, detenido, se desborda
como un dorado río.
Y deja ver en su lejano fondo
no sé que cosas olvidadas.
El día vuelve aun en una ráfaga
de sol,
y fija mariposas de oro
en el cristal de aire…
Hay una flauta en el silencio, una
melancólica boca enamorada,
y en la torre teñida de crepúsculo
repiten su blancura las palomas.

La tarde en que no estás… la tarde
en que te quiero.

Alguien que no conozco,
abre secretamente los jazmines
y cierra una a una las palabras.