Noviazgo 4 de Álvaro Cunqueiro

Noche azul de silencio
esquina de sí misma
oída por las amables
galerías de la luna.

Nadie piensa la lejana
melancolía tibia
de los espejos de luto
de tus ojos primeros.

Creciste como mansa
angustia de vidriados
alambre sin respuesta
de tu sexo solícito.

De una luz naufragada
entre rosales verdes
hiciste quince años
-Un abanico con pájaros.

La noche que no desciende
te vuelve a nosotros ahora
como puente sin río
o ventana en tierra firme.

Una estampa de sueño
tu fábula ahoga
desnudos tus cabellos
de antigua novia nueva.