Pasan los días
El vidrio de la luz se desvanece
No hay espejo capaz de verle el polvo
No hay ojo que lo pesque entrando en la otra orilla
filtrándose en la sombra
Pasan los días
Se entume el dedo      el lápiz        el verbo        la memoria
Piedra redonda      dura      el pensamiento
Esfera de vacío la palabra
Pasan los días
¿Qué hice ayer?
                            ¿Dónde estuve?
Y este olor             Esta mano
Este grito atorado en la garganta
como una nuez amarga.