radiografía de una tumba de Nacho Buzón

la muerte está en todas partes
en los aviones
en las carreteras
tras un árbol
en los pasos de cebra
dentro de un water
en los campos de maíz
en las botellas
en los combates de boxeo
dentro de una ola
en los parkings subterráneos
en las jeringuillas
en los casinos
tras un rayo
en la bombona de butano
acurrucada en un coche
en las pistolas
en los baños públicos
en tus manos
dentro de un furgón blindado
en la noche
la muerte no hace distinciones
de sexo raza o religión
se lleva a tu padre
a tu madre
al repartidor de pizzas
a la portera de la calle 14
al tres veces campeón de tenis
a los aztecas
romanos
fenicios
contemporáneos
al cantante de moda
al derviche de turno
al pobre
al más pobre
al rico
a mi abuela
a los jugadores de fútbol
al muchacho de color
y al blanquito
a las modelos
a los camellos
gualtrapas
santurrones
y filósofos de ocasión
a los tres reyes magos
al vecino de arriba
y también al de debajo
a ti
a mí

ante la inminencia de la muerte
no es necesario precipitarse
en hacer esas cosas que uno siempre quiso
y nunca pudo
teñirse el pelo
matar a un hombre
follarse a la mujer de tu hermano
robar un banco
ir a un concierto de leonard cohen
meterse un pico
tener un gato
comer iguana
bañarse en champagne
visitar egipto
ser político
tocar el piano
tener un hijo
o dos
comprarse un coche
nadar cien metros
casarse
donar un riñon
ver la tele
amar

ante la muerte sólo nos
queda morirnos