Al cabo de un tiempo
El pasado sumiso gira sin morder la cola
El espino se corona de cuarzo de sien
Los relámpagos de tejidos mudos
Las hojas son aire que se estremece
El espanto quiebra el báculo de la huella
Las patas de conejos raspan espejos
El trópico pierde en sus mandíbulas
Los frutos arrastran el tronco al monte
Cenan las piedras en el pozo de los niños
Las uñas de las plumas hacen cortacircuito
El arco del verbo pasa por el filo del clavel
Las bocas piden un bien a los traspiés
Las guaridas entregan los ríos perdidos
Los colores gimen en los polos
El bostezo cava la sed en la iguana
El celo galopa en el sol.
Se cumple la profecía de las 9.01 horas.
Sin poesía, la humanidad agoniza.
Primero mueren los poetas.
Tardíos y solitarios
los dioses se echan al hombro
las máscaras.
Sin poesía,
la humanidad agoniza
y la mujer que amamos da a luz otro amor.