Escalón a escalón, una cansada
mujer asciende como si del centro
de la tierra subiera. De allá adentro
honda sombra retiene en la mirada
Implacable le impone la escalera
su destino de tramos sucesivos.
Muertos ahora parecen los que vivos
deseos fueron de la primavera
Al mirarla subir tan abatida,
me pareció la imagen de la vida
resignada, y haciéndose la fuerte.
Mas sin embargo esta mujer subiendo
la escalera infinita, ahora comprendo
que es la imagen segura de la muerte.