El amor vuelve
de los abismos
como un viejo milagro
en nuestra edad de niños.
Y nos desgarra
con su voz torrencial
para gritarnos
que aún estamos vivos.
El amor vuelve
de los abismos
como un viejo milagro
en nuestra edad de niños.
Y nos desgarra
con su voz torrencial
para gritarnos
que aún estamos vivos.