Este asombro de ser apenas una
parte del universo, y ser sin duda
tan vasto como el orbe, y ser gemido,
e instante, y eco, y dardo sin destino
ni otra cosa que un rumbo me depare.
Este ser una sombra que no sabe
ni puede comprender, que olvida acaso
porque es su condición. Este atareado
afán, que no concibo, del complejo
mundo por explicar las causas, cierto
de que no hay explicación o hay tantas
que es vano todo empeño. Esta insensata
costumbre de mirarte en la secreta
certeza de saber que no hay respuesta…