Cada palabra es una herida mortal.
Debo tener cuidado.
Jorge Díaz
Noche, palabra mía henchida de sucesos
La aflicción, el vacío, la muerte, la tiniebla
avivan en tus sílabas sus temores y ansias.
Extenuado nombre, fatigada corola,
para caer de ti como cansino pétalo,
o hundirse en tus confines, abiertos, afilados,
beso ardiente, última sensación,
locura extrema.