Ave de Luciano Castañón

Pico de limón y garfio.

¿Por qué tan recelosa de lo humano?

Miro su testa curva y blanca, gris o parda

con laterales ojos avizores.

Se inquieta ante el supuesto daño

y en su soledad permanece taciturna y quieta.

Tragona; huraña; insolidaria.

Sobre la cúpula de la capilla :

vital, monjil veleta.

Cochina blanqueadora de tejados.

Movediza geometría

—en aleteo vespertino y lento—

hacia el dudoso mar incierto.

Esta ave comedora de despojos

que a veces en la turbia agua del muelle

su curvatura flota,

—o sobre una boya se mece—

es la gaviota.