Bestiario de Antonio Fernández Lera

Desde la sombra,
y en la noche
[pero al final te acostumbras a todo]
todo es diferente. Me pregunto
si alguien me oye.
¿Me oís vosotros?
¿Estáis ahí?
[No soy mas que una voz, una sombra].
Si no me oís no soy nada.
¿Estáis ahí?
[Silencio]
Tengo que seguir hablando.
Me pagan para seguir hablando,
[Que cuanto más corras
más te duela
y que cuando pares revientes].
Esto es como trabajar en la radio para siempre
y hablar
y hablar
y hablar
y hablar
y hablar.
O como trabajar en un periódico y escribir
y escribir
y escribir
y escribir
y escribir.

Disecado y con todas las plumas:
verde, rojo y amarillo.
Protegido del polvo y del aire,
silencioso
como un pájaro muerto.