Yo se que eres una ave fugitiva,
Un pez dorado que en las ondas juega,
Una nube del alba que desplega
Su miraje de rosa y me cautiva.
Se que res flor que la niñez cultiva
Y el hombre con sus lágrimas la riega,
Sombra del porvenir que nunca llega,
Bella a los ojos, y a la mano esquiva.