Sólo vengo a que ustedes se horroricen…
ya administra la aduana don Macario,
el de la estafa aquella, el refractario
digno de que un proceso le improvisen.
Escriban, por piedad… al mundo avisen
que ese hombre es ignorante y ordinario;
que se robó los fondos del Erario,
y tiene cola inmensa que le pisen.
&mdash:Tiene cola, es verdad, ¿de qué te inquietas?,
si puedes razonar una vez sola,
ya que nada en tu crítica respetas,
comprenderás que en medio de esta bola,
los hombres, don Severo, y los cometas,
para elevarse necesitan cola.