Ella de Nikolay Gumilyov

Yo conozco una mujer: el silencio,
El cansancio amargo de las palabras,
Vive en el centelleo furtivo
De sus pupilas dilatadas.

Su alma ansiosa está abierta
A la música metálica del verso.
Ante la vida lejana y placentera
Es sorda y altiva.

Sus pasos son extraños,
Lentos e inaudibles,
No se puede decir que sea bella
Pero en ella encuentro mi felicidad.

Cuando necesito fortaleza
Valiente y orgulloso la busco
Para aprender de su tierna sabiduría
Con todo delirio y languidez.

Ella es luz en las horas inciertas
Sostén cuando todo parece perdido
y sus sueños exactos son como sombras
Sobre la arena ardiente del paraíso.

Versión de Jorge Bustamante García