La lluvia de Nikolay Gumilyov

A través de los vidrios en la lluvia
El mundo se antoja abigarrado;
Al mirarlo poblado de colores
Todo en él me pertenece.

El verde se vuelve siniestro
Como si se hubiera sulfatado
Un matorral de rosas rojas
En él se ha dibujado.

Las gotas caen mesuradas en los charcos
y musitan sus propias canciones
Como cuando cantan las mujeres
Con voz apresurada por las tardes.

¡Gloria al cielo que anuncian las lluvias!
En este río de la primavera
Se mezclan en el agua turbia
Los peces y los troncos silvestres.

En las honduras vanas de los molinos mágicos
Se escucha el relincho de potros frenéticos
Y el alma, el más aciago de todos los cautivos,
Se torna libre y vuela.

Versión de Jorge Bustamante García