Lejanas estelas de junio de Alejandro Duque Amusco

Desciende de la mañana abierta
un ala gritadora.

Los manzanos
maduran
los zumos ácidos del sol.

Al mediodía, los animales
corren inquietos.
Rumores y latidos.
Oíd la profunda respiración
de la tierra.
Viene de más allá,
del otro lado de la luz,
como oleaje
entre sueños.

Mirad las lumbres vivas.

Libélulas llameantes,
rayos rizados de color.

Nupcial derramamiento en el atrio del verano.