Y ahora me voy a marchar,
y será triste este día:
de cien perlas que tenía
sólo una pude engarzar.
¡Ay! de la vida al través,
las ideas por miriadas,
del hombre, deja ignoradas
la ceguera o la estultez.
Y ahora me voy a marchar,
y será triste este día:
de cien perlas que tenía
sólo una pude engarzar.
¡Ay! de la vida al través,
las ideas por miriadas,
del hombre, deja ignoradas
la ceguera o la estultez.