Ay de los hiperbóreos gatos
del ambarino Vístula,
ay, de los gatos del Shangri Lá
omniásticos y videntes.
Ay de los gatos de Karnak
guardianes e intérpretes,
sombras prudentes del ronroneo fúnebre.
Ay, de los gatos equilibristas
ahogados en el Yang Tsé
y aparecidos intactos en Nazca y Titicaca.