Dejarme arrastrar por un flujo de sensaciones: realidad y fantasía combinan malévolamente hoy en
mí.
Todo nuevo amor refleja una carga eléctrica de un viejo y conocido circuito: felicidad, frustración.
La imagen más bella sería tu desnudo obtenido sin ofrecer mi cuerpo desnudo, de la misma manera
como observo mi serenidad en Safo o en San Juan el deseo, pero al menos que te hable de
Baudelaire no podría hablarte de la poesía.