ÚLTIMA RÉPLICA A OTRA CONTESTACIÓN A LA ANTERIOR

¡Extremada bizarría!
¡Rendimiento cortesano!
¡Bondad la del castellano
consumadísima es,
pues con una dama altiva
mueve altivo una querella,
por que logre el triunfo ella
de que se rinda a sus pies!

A quien vencido se aclama
con tan noble gallardía,
no tiene la musa mía
nada, señor, que añadir;
si no es que a vos mucho estima
el sacrificio costoso
del empeño generoso
que os obliga a desistir.

 » Leer Mas…

ÚLTIMA TARDE EN ANDALUCÍA

En despedidas nuestra vida pasa
cada día un adiós ¡ay triste vida!
¡que siendo vida en tiempo tan escasa,
la hayamos de pasar tan afligida!
Aun el de ayer nuestra mejilla abrasa
llanto de la postrera despedida,
y hoy se agolpa a los ojos otro tanto…
¡qué lluvia tan perenne es la del llanto!

 » Leer Mas…

ÚLTIMO CANTO

Emilio, mi canto cesa;
falta a mi numen aliento.
Cuando aspira todo el viento
que circula en su fanal,
el insecto que aprisionas
en su cóncavo perece
si aire nuevo no aparece
bajo el cerrado cristal.

Celebré de mis campiñas
las flores que allí brotaron
y las aves que pasaron
y los arroyos que hallé,
mas de arroyos, flores y aves
fatigado el pensamiento
en mi prisión sin aliento
como el insecto quedé.

 » Leer Mas…

UN AÑO MÁS

¡Un año más!… un año, Ángela mía,
y aún no ha mudado mi horizonte triste,
y de tan ancha tierra como existe
no he descubierto un palmo todavía;
¡un año más!… un año día tras día
lentos conté, y enero se reviste
de nuevo sol para ostentar mañana
su cabellera por los hielos cana.

 » Leer Mas…

UN OTRO CON IGUAL ASUNTO

Abrid los ojos, célica María,
más que la luna del enero, claros,
abrid los ojos y mirad cuán raros
son los dones que Dios tierno os envía:
el serafín más bello que tenía
entre sus dulces serafines caros
coronado de rayos celestiales
coloca en vuestros brazos virginales.

 » Leer Mas…

UN PAISAJE

Yo vi lucir los albores
de esa purísima atmósfera,
y brotar las claras aguas
de aquella ribera hermosa,
y nacer de su arboleda
una por una las hojas.

Yo he visto esas altas sierras
ir subiendo entre las sombras,
y alzarse el puente y la torre
y las casas y las rocas,
y surgir el barquichuelo
entre las plácidas ondas,
y aparecer en la orilla
esa gente pescadora.

 » Leer Mas…

UNA DESPEDIDA

Escuchad mis querellas,
recinto y flores del placer abrigo,
imágenes tan bellas
como ese cielo que os protege amigo.

Asilo de inocencia,
consuelo del dolor, bosque sombrío,
ir quiero a tu presencia,
y tu césped regar con llanto mío.

 » Leer Mas…

VERSOS IMPROVISADOS CON VARIOS MOTIVOS

LA EMPRESA DEL FERROCARRIL DE EXTREMADURA

Bien llegados a España, caballeros.
Esta joven nación, su tierra pura
os brinda a los amigos extranjeros
que lecciones la ofrecen de cultura:
por el terso carril marchen ligeros
los hijos de la rica Extremadura,
vuestras artes, y ciencias y portentos
a igualar y vencer con sus talentos.

 » Leer Mas…

Y LLÉVAME CONTIGO A TU MORADA

¡Qué abatida estará, Señor, mi vida
cuando no te consagro ni un acento!
¡Qué hundido debe estar mi pensamiento
cuando así te abandona, así te olvida!
Preséntasme la tierra florecida,
resplandeciente en lumbre el firmamento,
y en vez de bendecirte y celebrarte
bajo los ojos para no mirarte.

 » Leer Mas…

Estos pliegues de vida

Estos pliegues de vida
colgados a los huesos
esta cintura aún visible
donde te aferras
a ratos
estos muslos anchos recios
que trotan tus espacios
esta cadera ahuecada
estuche para tus manos
estas piernas que te asfixian
con nudo de terciopelo
desde la oscura garganta
hasta el fuego
-tierno
mástil
que trastorna los sentidos-
estos pies que te caminan
estas manos que te hurgan
esta mujer que te quiere,
aquí
en el cuarto imperfecto.

 » Leer Mas…

Ulises cotidiano

Traes en tu cuerpo la leyenda
de un navegante cansado.
Es tan grato, en silencio,
descalzarte de barcos,
recoger de tus ojos
las sirenas perdidas,
las redes enlamadas,
los sonidos ocultos de las olas.
Te espero cada noche
cuando levantas anclas en mi espacio
y una lluvia de estrellas
te hace perder el rumbo
y un enjambre de peces y caricias
nos recobra el naufragio tan deseado.

 » Leer Mas…

Soy

Soy recinto
de todas las palabras colgadas en el viento
de la luz que atraviesa mi curva cordillera
de la canción del sueño
del mar con sus espumas
del alma desbocada al filo de una estrella

Soy voz
que no se esconde
que explora sus tejidos
que aúlla en el misterio de todos los silencios
que murmura a la vida
que acecha en la vigilia
que da vuelo a la risa venciendo la nostalgia.

 » Leer Mas…

Bajo amorosa sombra

Cúrame con tus manos,
toca de mí el olvido
que se fue acomodando entre los pliegues.
No venga la tormenta a amordazar mis sueños,
sólo esta lluvia suave, vespertina
despierte en mí los pétalos dormidos.
Desnúdame en silencio,
hoja por hoja
hasta dejar al descubierto el punto
del estremecimiento.

 » Leer Mas…

Amatorio

Desnuda
me miro en el espejo perturbable.
No tengo rostro
mi signo del zodiaco es el desorden.

Sola estoy
cuando podría ser otra vez el lento
obstinado presagio de tus dedos.

Este es sólo el exordio del placer.

 » Leer Mas…

A una dama que iva cubierta

El corazón se me fue
donde vuestro vulto vi,
e luego vos conocí
al punto que vos miré;
que no pudo fazer tanto,
por mucho que vos cubriese,
aquel vuestro negro manto,
que no vos reconociese.

Que debaxo se mostrava
vuestra gracia y gentil aire,
y el cubrir con buen donaire
todo lo magnifestava;
así que con mis enojos
e muy grande turbación
allá se fueron mis ojos
do tenía el corazón.

 » Leer Mas…

Canción (Con la beldad me prendistes)

Con la beldad me prendistes,
con la gracia me robastes,
con la bondad me feristes,
al punto que me mirastes.

De la prisión no recelo,
que de mi grado será,
ni por el robo me duelo,
pues en tal lugar está;

mas del golpe que me distes
con la bondad que mostrastes,
el más triste de los tristes
para siempre me tornastes.

 » Leer Mas…

Retorno

He conocido las voces
que me llamaban antes de nacer,
por el sobresalto que he sentido
pienso que ya es la hora.

Éste es mi primer viaje
y me ha parecido tan breve.
Guardián de esta miserable estancia
acércate y observa,
árboles, madrugadas y vasijas
todo está en su sitio.

 » Leer Mas…

Poema a mi Sobrenada

el sobretodo es mi mejor amigo

bebemos vino de consagrar en los viñedos

y nos emborrachamos,

compartimos el amor con las mujeres.

mi sobretodo es sensual y seductor.

en la cárcel era un colchón

en los prostíbulos era un refugio

con las manos hundidas en los bolsillos

que me salvaba del naufragio de los besos baratos.

 » Leer Mas…

CANTICA

¡Eya, velar! ¡Eya, velar! ¡Eya, velar!

Velat, aljama de los judíos,
¡eya, velar!,
que non vos furten al Fijo de Díos.
¡Eya, velar!
Ca furtárvoslo querrán,
¡eya, velar!,
Andrés e Peidro et Johán.
¡Eya, velar!
Non sabedes tanto descanto,
¡eya, velar!,
que salgades de so encanto.

 » Leer Mas…

EL CLÉRIGO Y LA FLOR

Milagros de Nuestra Señora – versos 401 a 460

III

Leemos de un clérigo que era tiestherido,
ennos vicios seglares ferament embevido;
peroque era locco, avié un buen sentido,
amava la Gloriosa de corazón complido.

Comoquiere que era en ál malcostumnado,
en saludar a ella era bien acordado;
nin irié a la eglesia nin a ningún mandado,
que el su nomne ante non fuesse aclamado.

 » Leer Mas…